Camila Perissé murió en horas del mediodía de este martes en el hospital Español. La actriz tenía 70 años y era una de las figuras más destacadas del cine y el teatro de los años ‘80, luchó contra las adicciones y logró rehacer su vida. En los últimos cinco años, tuvo complicaciones con su salud y peleó por su vida con internaciones en Mar del Plata y Buenos Aires, hasta que su cuerpo dijo basta.

La noticia se conoció a través de su marido, Julio Chino Fernández, quien acompañó cada uno de los momentos de la actriz y estuvo a su lado hasta el final. Se conocieron en un bar que tenía él, de profesión cantante de tangos, en uno de los momentos más duros de la actriz.
Quién era Camila Perissé
Camila Porro, como es su nombre verdadero, nació en Mar del Plata el 1° de enero de 1954 y a los seis años se mudó con su familia a Capital Federal. Durante su infancia, combinó los estudios académicos con las primeras señales artísticas, y a los 15 años se recibió de Profesora de Danzas Nativas.

Estudió teatro con Carlos Gandolfo, también con Agustín Alezzo y Hedi Crilla, los profesores más prestigiosos de ese momento y debutó en el escenario con Despertar de Primavera. La gran popularidad le llegó con la televisión, como la partenaire de uno de los cómicos más importantes de la época: Tato Bores, con quien estuvo en los ciclos Tato vs. Tato, Extra Tato y Tato Diet. Y luego derecho a las tapas de revistas y se convirtió en sex symbol de una generación, pero enseguida comenzaron los problemas. La droga, la depresión, el olvido.

Probó suerte en Nueva York y en Madrid, encontrando su lugar en el ambiente más under, lejos de los puntos de rating y de los puestos de diarios, postales de otro tiempo y otro mundo. Su última aparición pública antes de ser noticia por su enfermedad fue en 2019, en Quién quiere ser millonario, donde reveló el cambio que había experimentado en su vida.
La salud de la actriz
Camila Perissé tuvo muchas complicaciones con su salud, con un cuadro de Alzheimer en un estado avanzado. De acuerdo al testimonio de su marido, los problemas de la actriz iniciaron producto de una mala praxis con una medicación.
A raíz de esto, según su relato, la actriz llegó a perder la conciencia y la memoria por completo. Desde entonces, su estado experimentó altas y bajas, hasta quedar postrada en una cama, sin la posibilidad de volver a caminar. Además la pareja tuvo que enfrentar graves problemas económicos ya que Julio se encuentra desempleado, mientras que ella recibía una jubilación mínima.

Hace una semana la salud de Camila se había deteriorado aún más y ya se pronosticaba el peor desenlace, hasta hoy que su vida se apagó. Una luchadora que peleó en vida y también, al umbral de la muerte, y que será recordada como aquella mujer luminosa que enamoró a más de una generación.