Ante la difícil situación económica que se vive en Argentina desde hace unos años, distintas familias se ven obligadas a rebuscarselas para sobrevivir. En las calles de Paraná se ven cada vez más personas que ofrecen productos para hacer algo de dinero.

Tal es el caso de una familia que puso un puesto de torta fritas, bolas de fraile y churros. “Mi marido trabaja, pero no alcanza”, expresó la mujer que lleva adelante el emprendimiento, pero cuenta con la colaboración de toda su familia. Sobre las horas de trabajo indicó: “Estamos desde las 7 de la mañana hasta las 8 de la noche que llegamos a casa”. El puesto lleva más de cuatro años supo Canal 9 Litoral.

“Es la única salida que uno tiene en este momento hasta que se acomode todo esto”, expresó un hombre que vende pescado en un puesto callejero en Provincias Unidas y División de los Andes. Sobre la labor que realiza día a día, contó que tenía el puesto en Bajada Grande, pero que por la lejanía decidió mudarse con la venta a una zona más transitada: “vos tenes que movilizarte para llevarle la comodidad a la gente”. Sobre cómo están las ventas, expresó que “están flojas”, sin embargó agregó “si vos te quedas esperando. Tenés que salir a buscar que la gente te compré”.

En otra parte de la ciudad, un joven se la rebusca vendiendo vasos de vidrio A 1.500 pesos. “Lo hago para alimentar a la familia”, contó. Sobre la venta también coincidió en que está difícil: “La gente no compra porque no hay plata”, expresó.

 Sobre Avenida Ramírez y Provincias Unidas también se encuentra una familia con carribar que ofrece torta fritas, tortas asadas y otros productos desde el 2017. Una de sus dueñas contó que “si uno sabe manejar el negocio se puede vivir de ésto”. Y al finalizar reflexionó “hay que trabajar para vivir, no vivir para trabajar”.