Según la Organización Mundial de la Salud, el consumo excesivo de alcohol puede causar, con el tiempo, más de 200 enfermedades. Entre ellas, se encuentran la hipertensión, enfermedad cardíaca, accidentes cerebrovasculares, enfermedad del hígado y problemas digestivos, cáncer de mama, boca, garganta, laringe, esófago, hígado, colon y recto.
También puede afectar al cerebro, generando problemas de aprendizaje y memoria, y también depresión y ansiedad. Y lo último que los científicos han demostrado es que el alcohol puede acelerar el Alzhéimer, incluso con un consumo moderado.
“Esta es la enfermedad neurodegenerativa más común en todo el mundo. Muchos esfuerzos se han orientado para identificar de factores de riesgo ambientales y genéticos que influyen en la aparición de Alzheimer. Sin embargo, el alcohol ha recibido una atención limitada como factor de riesgo potencial para la EA”, expresaron en el estudio.
“Descubrimos que un historial de intoxicación repetida por alcohol promueve la aparición de deficiencias en el aprendizaje espacial y la memoria en ratones presintomáticos transgénicos triples AD (3xTg-AD)”, dijeron los autores. Y agregaron: “También mostramos que una historia de intoxicación repetida por alcohol induce cambios transcripcionales en la corteza prefrontal asociados con la progresión de la EA”.
Mayor riesgo
El doctor Ricardo Allegri, (MN 63538), jefe de Neurología Cognitiva, Neuropsicología y Neuropsiquiatría de Fleni explicó a Infobae: “El consumo excesivo de alcohol está asociado con mayor riesgo de deterioro cognitivo, y demencia. En un estudio longitudinal francés sobre 31 millones de personas admitidas en hospitales, el abuso de alcohol estuvo asociado con aumento del riesgo de demencia”.
Y agregó: “El exceso de alcohol tiene una acción directa sobre el cerebro, se ha demostrado que en estos sujetos no solo se afecta la memoria sino que se describe también una atrofia hipocampal. Por otra parte, hay trabajos en ratones transgénicos que muestran que este exceso genera cambios en la expresión génica acelerando la progresión de la enfermedad de Alzheimer”.
En otro estudio, publicado en febrero de 2023 en Science Direct, científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad Wake Forest (Estados Unidos) demostraron que incluso cantidades modestas de alcohol pueden acelerar la atrofia cerebral, que es la pérdida de células cerebrales, y aumentar el número de placas amiloides, que son la acumulación de proteínas tóxicas en la enfermedad de Alzheimer.
“La exposición crónica al alcohol altera el metabolismo relacionado con el amiloide-β (una proteína que suele acumularse en el cerebro de las personas con Alzheimer)”, introdujeron en la investigación, que fue publicada en la revista Neurobiology of Disease.
Para los autores, el consumo problemático “aumenta la atrofia cerebral y el número de placas amiloides, y altera los comportamientos relacionados con la ansiedad y la demencia”.
Shannon Macauley, una de las científicas a cargo del trabajo, señaló: “Estos hallazgos sugieren que el alcohol puede acelerar una cascada de patologías de las fases tempranas del Alzheimer”. Y advirtió: “Incluso el consumo moderado de alcohol puede tener como resultado una lesión cerebral y puede ser un factor de riesgo modificable de la enfermedad de Alzheimer y de la demencia”.

¿Cuánta cantidad de alcohol puede afectar al cerebro?
“El límite lo ponen en 21 unidades de alcohol por semana (1 unidad = 8 gramos) (Piumatti et al 2018). En los estudios de factores de riesgo de demencia el exceso de alcohol (más de 21 unidades) en la edad media de la vida es considerado un factor de riesgo claramente modificable”, respondió Allegri.
Para concluir, los investigadores del estudio de la Facultad de Medicina de la Universidad Wake Forest llamaron a “identificar más factores de riesgo que aceleran la aparición de la enfermedad de Alzheimer, ya que los estudios epidemiológicos identificaron el trastorno por consumo de alcohol como uno de ellos”. Infobae