El paciente de 57 años que había sido sometido con éxito al primer trasplante de corazón de un cerdo murió dos meses más tarde de un virus porcino, anunció su cirujano.
En enero, David Bennett, un trabajador de mantenimiento que sufría de insuficiencia cardíaca, se sometió a una cirugía altamente experimental en el centro médico de la Universidad de Maryland en la que los médicos le trasplantaron un corazón de cerdo genéticamente modificado.
Poco después de someterse a la cirugía, y tras el primer reporte positivo de adaptación, Bennett murió finalmente en marzo. El hospital simplemente dijo que su condición había empeorado en el lapso de unos días, pero no proporcionó una causa exacta de muerte.
El mes pasado, el cirujano de trasplantes de Bennett, Bartley Griffith, reveló que el corazón del cerdo estaba infectado con un virus porcino conocido como citomegalovirus porcino, que pudo haber contribuido a la muerte de Bennett. En un seminario web organizado por la Sociedad Estadounidense de Trasplantes el 20 de abril, Griffith describió el virus y los intentos de los médicos para tratarlo, informó Elpais.com.
“Estamos comenzando a saber por qué falleció”, dijo Griffith, y agregó: “el virus tal vez fue el actor, o podría ser el actor, lo que provocó todo esto”.
Según los expertos, el trasplante fue una “prueba importante de xenotrasplante”, un proceso que implica la transferencia de tejidos entre múltiples especies. Creen que el experimento puede haberse descarrilado como resultado de un “error no forzado”, ya que se supone que los cerdos que fueron criados para proporcionar órganos están libres de virus.
“Si esto fue una infección, probablemente podamos prevenir que suceda en el futuro”, dijo Griffith.
El mayor desafío en los trasplantes de órganos de animales a humanos es la resistencia del sistema inmunológico humano, ya que puede atacar células extrañas en un proceso llamado rechazo y desencadenar una respuesta que finalmente destruirá el órgano o tejido trasplantado.
Poco después de la cirugía de Bennett, Griffith y su equipo monitoreaban con frecuencia su recuperación a través de varios análisis de sangre. En una de las pruebas, los médicos examinaron la sangre de Bennett en busca de rastros de varios virus y bacterias y encontraron “una pequeña señal” que indicaba la presencia de citomegalovirus porcino. Sin embargo, debido a que sus niveles eran tan bajos, los médicos asumieron que el resultado podría haber sido un error.David Bennett, de 57 años, fue la primera persona en someterse a un transplante de corazón de cerdo modificado genéticamente, pero murió dos meses después aparentemente a causa de un virus porcino.