La crecida del río Gualeguaychú las últimas semanas todavía ha dejado secuelas en los ciudadanos y uno de los sectores más afectados fueron los prestadores turísticos. Complejos que estaban a la rivera sufrieron severas inundaciones e incalculables pérdidas.
Uno de ellos fue Punta Sur, donde el agua tapó 12 cabañas. “El punto más alto donde llegó el agua fueron 2,45 metros. Acá donde estamos ahora llegó a 1,90 metros, es decir nos taparía”, dijo Roberto Carro, propietario, en diálogo con Canal 9 Litoral.
“En este momento estamos afectados totalmente por la creciente. Creemos que hasta octubre o noviembre nos vamos a poder abrir el complejo“, aseguró. El proceso de reconstrucción es complicado para Roberto, ya que todavía el pronóstico no es alentador: “Hasta que no llegue La Niña no podemos hacer nada”, dijo.
Las pérdidas son incalculables, o al menos así lo entiende él, ya que todavía no se han puesto a analizar los daños. “Algunas cosas se las llevó el agua, otra cosas de mantenimiento o mobiliario se perdieron”, indicó.
“A veces la gente no sabe en realidad lo afectado que estamos. Lógicamente que no es culpa ni del clima ni del río ni de nada. La culpa real es de nosotros que construimos sobre la vera del río”, manifestó convencido Carro. “Esto tendríamos que haberlo construido en altura, pero en ese momento no lo sabíamos. Vine acá con 33 años y estoy llegando a los 69”, añadió.
Para finalizar, Roberto indicó que a pesar de la situación crítica “ya ha pasado varias” y aguarda con esperanzas una época con menos precipitaciones. “Ahora estamos trabajando en sacar barro”, finalizó.