Javier Martínez, líder de Manal, recibió el último adiós en una casa fúnebre de Chacarita acompañado por Moris, Hilda Lizarazu, Lito Vitale, Miguel Zavaleta, Willy Quiroga, entre otros.
Son días de muchísimo dolor para la música argentina por la muerte de Javier Martínez, quien fue líder de Manal y uno de los músicos referentes del rock nacional y el blues. En una casa velatoria de Chacarita se velaron sus restos hasta donde llegaron algunos de los músicos más importantes del país para despedir a un referente de la música en nuestro país.
El cantante, que estuvo en terapia intensiva en un centro de alta complejidad del barrio porteño de Almagro recibió el último adiós.
Moris, Lito Vitale, Hilda Lizarazu, Miguel “Botafogo” Vilanova, Willy Quiroga, Claudio Kleiman, Marcelo Corvalán, son algunas de la figuras que pasaron a despedir al músico.
Dora Martínez, la hermana de Javier, quien fue la encargada de informar la triste noticia de la muerte del artista, acompañó también a su hermano en su último adiós.
Martínez un gran referente del rock nacional
El baterista, cantante y compositor Javier Martínez, uno de los motores del legendario trío Manal que inventó el blues en castellano, falleció este sábado a los 78 años, como consecuencia del agravamiento de problemas de salud que arrastraba desde hace tiempo y que se detectaron a partir de una internación del jueves pasado debido a una caída en su domicilio.
El artista, que será recordado como un músico talentoso e innovador, fue creador de clásicos de la música argentina como “Jugo de tomate”, “Casa con diez pinos”, “No pibe”, “Necesito un amor”, “Avenida Rivadavia”, “Informe de un día”, “Nos veremos mañana”, “Porque hoy nací” y “Avellaneda Blues”, esta última en coautoría con el guitarrista Claudio Gabis, integrante del terceto que completaba, Alejandro Medina.
Esa conjunción sonora reunida en Manal se hizo presente desde el primer momento con su álbum debut homónimo lanzado en el verano de 1970 y con el que el blues local tuvo su big bang y hasta el día de hoy se erige como uno de los más grandes discos del rock de este lado del mundo.
